La Unión Siríaca condena el atentado contra la iglesia de Mar Elias, responsabiliza al gobierno de transición de la protección de lugares sagrados

El Partido de la Unión Siríaca en Siria emite una declaración condenando enérgicamente el bombardeo que atacó a la Iglesia Mar Elias en el barrio Dweila de Damasco por la noche, que resultó en docenas de mártires e heridos entre los fieles inocentes.

La declaración describe el acto terrorista como un "crimen bárbaro dirigido al tejido mismo de la unidad nacional de Siria, destinado a desestabilizar la seguridad e incitar a la lucha sectaria en el país". Afirma que "este ataque cobarde, reivindicado por la organización terrorista ISIS, representa una grave escalada contra los cristianos en Siria y un claro intento de intimidarlos y desplazarlos de su patria".

La declaración hace plenamente responsable al gobierno de transición sirio de proteger la vida de los ciudadanos y garantizar la seguridad de los lugares sagrados. Piden una investigación rápida sobre el incidente y que los responsables fueran llevados ante la justicia.

"Las continuas deficiencias de seguridad y administrativas exacerban los riesgos que enfrentan las minorías religiosas y étnicas", dicen en el comunicado, "dejándolas vulnerables y potencialmente obligando a nuestras comunidades a depender de sus propios medios para la protección".

La declaración hace hincapié en la importancia de fortalecer la unidad nacional y la solidaridad entre todos los sirios. Rechaza cualquier intento de dividir a la sociedad a lo largo de líneas sectarias o étnicas, y pide la construcción de una Siria democrática y pluralista que respetara los derechos de todos sus ciudadanos.

En la declaración ofrecen sus más sinceras condolencias a las familias de los mártires y deseando una pronta recuperación a los heridos. También expresó su confianza en la capacidad del pueblo sirio para superar este calvario mediante la defensa de los valores nacionales y la paz civil.

ANHA