Académico kurdo: Siria necesita un cambio histórico, no un compromiso

El político kurdo y académico Dr. Jalal Mulla Haji enfatiza que: "Lo que se requiere de Damasco hoy, aunque sea temporal, no es una concesión, sino una transformación histórica hacia un estado que abarque a todos sus ciudadanos"

Académico kurdo: Siria necesita un cambio histórico, no un compromiso
13 June, 2025   10:32
QAMISHLO
RINAS REMO

Una delegación kurda se está preparando para dirigirse a Damasco para negociar con la autoridad de Damasco sobre los derechos del pueblo kurdo en Siria y su representación justa en la futura constitución siria, asegurando una Siria democrática que garantice los derechos de todos los componentes y segmentos del pueblo sirio.

La Agencia ANHA realizó una entrevista con el político kurdo y académico Dr. Jalal Mulla Haji, profesor de ingeniería de la Universidad de San Diego en California, EE. UU. Afirma que los kurdos tienen una dimensión histórica, política, cultural, social y basada en la lucha en Siria desde la antigüedad.

Mulla Haji señala que los kurdos se encuentran entre los componentes sociales activos en el Levante, habiendo participado en todos los movimientos de liberación nacional contra la ocupación otomana y el mandato francés, y participando en partidos políticos, con presencia en el parlamento y el ejército sirios.

Texto de la entrevista:

¿Cómo evalúas la participación de los kurdos en la construcción de Siria a lo largo de la historia?

La participación de los kurdos en la construcción de Siria a lo largo de la historia ha sido significativa y fundamental, a pesar de los desafíos políticos y sociales a los que se enfrentaron. Su contribución se puede evaluar a través de varias dimensiones:

Dimensión histórica y política:

Preindependencia: Los kurdos estaban entre los componentes sociales activos en el Levante durante el dominio otomano y participaron en movimientos nacionales contra el mandato francés.

Después de la independencia (1946): Los kurdos participaron en la vida política, con algunos uniéndose a partidos nacionales como el Partido Comunista Sirio, y tuvieron presencia en el parlamento y el ejército.

Dimensión cultural y social: Los intelectuales kurdos contribuyeron al periodismo y la literatura siria, a pesar de las políticas restrictivas impuestas a la cultura kurda, especialmente después de la década de 1960. Destacadas figuras kurdas surgieron en campos como la literatura, el teatro y las artes visuales.

Dimensión militar y de lucha: Muchos kurdos se unieron al ejército sirio y participaron en grandes guerras, como la guerra de 1948 y la guerra de octubre de 1973. Durante la revolución siria y sus secuelas, los kurdos, particularmente a través de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) y las Unidades de Protección Popular (YPG), desempeñaron un papel importante en la lucha contra el ISIS, ganando reconocimiento internacional.

Participación en la construcción de instituciones alternativas en el noreste de Siria: Los kurdos contribuyeron al establecimiento de un sistema administrativo semiautónomo (la Administración Autónoma del Norte y del Este de Siria), basado en los principios de democracia participativa y representación multiétnica. A pesar de la controversia política en torno a este modelo, representa un intento kurdo de construir un proyecto político y social dentro de Siria.

Desafíos y marginación: Los kurdos se enfrentaron a décadas de marginación, sobre todo el censo de 1962 que despojó a decenas de miles de kurdos de la ciudadanía siria, prohibió la educación en el idioma kurdo e impuso políticas de arabización forzada en sus regiones.

Evaluación exhaustiva: A pesar de la exclusión política y las restricciones a la identidad y la cultura, los kurdos han contribuido efectivamente a la vida siria en aspectos políticos, militares y culturales. Se puede decir que su participación siempre ha estado presente, incluso si el reconocimiento oficial se ha retrasado.

Desde la revolución siria, los kurdos han protegido sus regiones, construido fuerzas militares y preservado la unidad de Siria contra el terrorismo y la ocupación. ¿Qué papel juega esto en la construcción de una nueva Siria?

Su pregunta es crucial para comprender las profundas transformaciones que Siria ha sufrido desde 2011 y el papel de los kurdos en ellas. Los esfuerzos de los kurdos para proteger sus regiones y establecer instituciones militares y civiles han tenido un impacto significativo y directo en cualquier proyecto futuro para construir una "nueva Siria". Aquí hay un desglose detallado de este rol desde varias perspectivas:

Preservar la unidad de Siria y enfrentar el terrorismo:

Después de la retirada del régimen del noreste de Siria en 2012, los kurdos no buscaron la secesión, sino que defendieron sus áreas mientras enfatizaban la unidad de Siria y su diversidad étnica y religiosa.

Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) y las Unidades de Protección Popular (YPG) desempeñaron un papel central en la derrota de ISIS en batallas cruciales como Kobani, Raqqa y Manbij. Estas fuerzas fueron la columna vertebral de la coalición internacional contra el terrorismo, reformando los equilibrios militares en suelo sirio.

Construyendo un modelo administrativo civil - La administración autónoma:

El esfuerzo kurdo no se limitó a la esfera militar. Establecieron un modelo administrativo civil (la Administración Autónoma del Norte y del Este de Siria) basado en la democracia descentralizada, la participación comunitaria (a través de los consejos locales) y la representación de varias etnias y religiones (árabes, kurdos, siríacos, asirios, armenios). Aunque no se reconoce internacionalmente, este modelo ofrece una alternativa práctica al fallido modelo estatal centralizado y monolítico que no podía gestionar la diversidad de Siria.

Una experiencia práctica de convivencia y participación:

En las regiones de la Administración Autónoma, se implementó el principio de una "nación democrática", fomentando la cooperación entre componentes sin dominio étnico o sectario. Esto refleja una visión avanzada para una Siria futura basada en el reconocimiento de los derechos culturales y políticos de todos los componentes sin amenazar la unidad nacional.

Lecciones para construir un estado futuro:

Las acciones de los kurdos proporcionan pilares esenciales para construir una nueva Siria:

Descentralización: Un modelo administrativo que reconoce los derechos de las comunidades locales sin separarse del estado.

Representación Justa: Un sistema político que garantiza la participación de todas las etnias y religiones.

Reconocimiento de identidad: Aceptar la diversidad cultural, lingüística y religiosa como una fortaleza, no como una amenaza.

Lucha contra el terrorismo: Fuerzas locales organizadas comprometidas con la lucha contra el extremismo dentro de una visión nacional.

El papel de los kurdos después de la revolución no era solo proteger sus regiones, sino proponer un modelo alternativo para construir Siria sobre nuevos cimientos: democracia, pluralismo y descentralización. Si se integra en un diálogo nacional integral, este modelo podría constituir la base de una nueva constitución que reconozca todos los componentes del pueblo sirio.

¿Qué se requiere de la autoridad temporal de Damasco para el futuro de los kurdos en Siria?

Esta pregunta aborda el núcleo de la cuestión siria y el futuro de los kurdos, destacando la responsabilidad de la autoridad de Damasco (el actual régimen sirio) de transformarse en un estado que abarque todos sus componentes, especialmente a los kurdos. A continuación se presentan los puntos clave de lo que se requiere de Damasco, tanto temporal como estratégicamente, para garantizar el futuro de los kurdos dentro de una Siria unificada:

Reconocimiento constitucional de los kurdos como componente fundamental:

Reconocer a los kurdos como una nacionalidad original y arraigada en Siria, no como invitados o recién llegados, con inclusión explícita en cualquier constitución siria nueva o enmendada.

Restaurar la ciudadanía a decenas de miles de kurdos la despojó debido al censo de 1962, que privó a más de 300.000 kurdos de derechos de trabajo, educación y propiedad. Se necesita una decisión urgente y final para restaurar la ciudadanía de inmediato, sin condiciones ni retrasos.

Reconocimiento de los derechos culturales y lingüísticos:

Permitir la educación en el idioma kurdo en las escuelas oficiales de las áreas kurdas.

Apoyar a las instituciones culturales kurdas, fomentar la publicación y la producción en kurdo, y reconocer al kurdo como lengua oficial de apoyo en las regiones de mayoría kurdas.

Aceptación de la descentralización administrativa y política:

Implementar un sistema descentralizado genuino que permita a las administraciones locales (como la Administración Autónoma) gestionar sus asuntos económicos, educativos y de seguridad dentro de un marco nacional. Esto no significa secesión, sino desarrollar un modelo de gobernanza adecuado a la diversidad de Siria, evitando el regreso de la centralización represiva.

Inclusión de los kurdos en el proceso político y constitucional:

Involucrar a auténticos representantes kurdos (no solo a los elegidos por el régimen) en la redacción de la constitución, las negociaciones de Ginebra o cualquier proceso de paz, así como instituciones estatales transitorias y futuras.

Integración de las SDF en un Sistema de Defensa Nacional:

Reconocer el papel heroico de las SDF en la lucha contra el terrorismo y trabajar hacia su integración organizada y condicional en un futuro ejército nacional sirio, asegurando que no estén marginados ni sean atacados. Esta integración debe ocurrir bajo un acuerdo político claro que proteja las ganancias de los componentes.

Poner fin a las políticas de seguridad represivas y las detenciones:

Liberar a los detenidos políticos o culturales kurdos, desmantelar los aparatos de seguridad dirigidos a los activistas kurdos y abrir espacio para el trabajo cívico y político legítimo.

En resumen, lo que se requiere de la autoridad de Damasco hoy en día, aunque sea temporal, no es una concesión, sino una transformación histórica hacia un estado que abrace a todos sus ciudadanos. El futuro de los kurdos en Siria debe basarse en el reconocimiento, la justicia, la asociación y la descentralización; de lo contrario, el país permanecerá en un ciclo de división y tensión.

Una delegación kurda se dirige a Damasco para negociar. En su opinión, ¿qué se requiere de ellos para asegurar los derechos del pueblo kurdo en Rojava?

Una delegación kurda unificada que se dirige a Damasco para negociar es una rara oportunidad histórica que no debe desperdiciarse. Las demandas de la delegación deberían equilibrar los derechos nacionales fundamentales del pueblo kurdo en "Rojava" (Siria del Norte y del Este) con la preservación de la unidad y la soberanía de Siria. A continuación se muestra una visión completa de lo que la delegación puede exigir, con prioridades claras:

Reconocimiento oficial del pueblo kurdo y sus derechos nacionales:

Incluir a los kurdos como un componente original y principal de Siria en la próxima constitución.

Reconocer el idioma kurdo como un idioma oficial en sus regiones junto con el árabe y reconocer los derechos culturales, lingüísticos y educativos kurdos.

Legitimación de la Administración Autónoma dentro del Estado Sirio:

Reconocer la Administración Autónoma Democrática del Norte y del Este de Siria como una forma de gobernanza local descentralizada.

Redacción de un acuerdo legal/constitucional que defina los poderes de la Administración Autónoma en materia de educación, seguridad local, gestión de recursos y poder judicial local. El objetivo no es la secesión, sino garantizar el fin de la autoridad central represiva y garantizar la participación kurda en el futuro estatal de Siria.

Representación oficial y justa de los kurdos en todas las instituciones estatales:

Incluyendo a los representantes de Rojava en la redacción o enmienda de la constitución, el parlamento, el gobierno, el ejército y los órganos constitucionales.

Ciudadanía y Justicia de Transición:

Una resolución radical y final a la cuestión de aquellos despojados de la ciudadanía desde 1962, liberando a todos los detenidos políticos kurdos de las prisiones del régimen y formando un organismo conjunto para investigar los crímenes del régimen pasado contra el pueblo kurdo, asegurando que no se repitan.

Integración organizada de SDF en la Estructura Estatal:

Firmar un acuerdo oficial que garantice:

El SDF no está disuelto ni procesado y está integrado en un "ejército nacional sirio" como una fuerza de defensa local en sus regiones.

Respeto por las especificidades de seguridad local en las áreas de Administración Autónoma.

La delegación no debería entregar armas sin garantías políticas y constitucionales genuinas.

Derechos económicos y de desarrollo para las regiones kurdas:

Reconocer los derechos de las regiones kurdas a gestionar sus recursos naturales, como el petróleo y la agricultura.

Asignación de presupuestos estatales justos para el desarrollo de áreas privadas y reconstrucción bajo supervisión conjunta, no centralizada.

Un enfoque de negociación inteligente:

Presentar las demandas no como una "lista de condiciones", sino como bases para una solución integral para Siria, vinculando los derechos kurdos con el futuro de una Siria democrática, no solo con las áreas kurdas.

La unidad kurda es un requisito previo para la fuerza de negociación; la delegación debe hablar con una sola voz política.

El diálogo con Damasco no significa someterse al régimen, sino presionar por un cambio real. Las garantías u observadores internacionales deben estar presentes si se llega a un acuerdo.

ANHA